Aunque los dolores de espalda pueden aparecer a cualquier edad, es cierto que a medida que cumplimos años se incrementan las probabilidades de sufrir una patología en la columna vertebral, especialmente si no adoptamos hábitos que contribuyan en la salud y el bienestar de esta parte tan importante de nuestro cuerpo. Por ello, es esencial conocer los cuidados de la columna vertebral en personas mayores.
¿Te gustaría descubrir las mejores pautas para evitar problemáticas en la columna vertebral debido a la edad? ¡Quédate a leer este post, te mostramos todo lo que debes saber a continuación!
Mantente activo
El sedentarismo afecta muy negativamente a nuestra espalda, siendo necesario practicar deporte y mantenernos activos para minimizar la posible aparición de enfermedades en la columna vertebral.
En personas mayores se recomienda caminar y realizar ejercicios de forma periódica, fortaleciendo su musculatura, beneficiando a su organismo y disminuyendo el peso que debe soportar su columna.
Evidentemente, este entrenamiento físico deberá adaptarse a las características y las peculiaridades de cada persona. Por suerte, existen muchas disciplinas entre las que elegir.
Cuida tu higiene postural
Las posturas que adoptamos a lo largo del día y la forma en la que ejecutamos nuestras tareas cotidianas también va a influir de forma muy notable en la salubridad de nuestra columna vertebral, especialmente si somos personas mayores.
En primer lugar, debemos evitar pasar mucho tiempo sentados, levantándonos frecuentemente para estirarnos. Además, para sentarnos correctamente, nuestra espalda debe permanecer recta junto al respaldo y nuestros pies deben poder apoyarse en su totalidad en el piso.
Para levantar objetos y evitar lesiones, tendremos que recurrir a la ayuda de otra persona si el artículo es muy pesado. Si su peso no es excesivo, bajaremos doblando las rodillas y manteniendo nuestra espalda recta. Después sostendremos el objeto lo más cercano al pecho que podamos y nos levantaremos poco a poco sin mover la espalda.
Por otro lado, debemos conocer la manera más adecuada para levantarnos de la cama. Para ello, nos colocaremos de lado, echaremos nuestras piernas fuera de la cama y emplearemos la mano que no pega al colchón para impulsarnos.
Cabe resaltar que tendremos que evitar la realización de movimientos repetitivos y no mantener encorvada la espalda durante mucho tiempo en la realización de determinadas tareas.
Asegura tu hogar
Entre los cuidados de la columna vertebral en personas mayores no podemos olvidarnos de asegurar nuestro hogar. Muchas de las caídas que sufren las personas mayores se producen en el interior de sus viviendas, al no contar con los mecanismos de seguridad necesarios.
En este sentido, se recomienda colocar barras de apoyo en la bañera y, también, cerca del inodoro, para poder utilizarlas al levantarnos o evitar una caída si nos resbalamos.
La iluminación también debe ser regulada ya que, con la edad, nuestra capacidad visual suele verse mermada, siendo necesario intensificar la luz de las habitaciones, para poder visualizar posibles obstáculos que podrían ocasionar un golpe o caída.
Del mismo modo, las estanterías del baño o la cocina en las que se encuentran los utensilios que más utilizamos deben ser colocadas a nuestra altura, para evitar agacharnos constantemente.
Refuerza tu masa ósea
Contar con una baja densidad ósea hace que nuestros huesos no se encuentren fuertes, incrementando la posibilidad de sufrir una rotura.
De este modo, debemos ser más precavidos y respetar nuestra alimentación, consumiendo alimentos ricos en calcio y vitamina D, la cuál favorecerá la absorción de este mineral. Así, se vuelve necesario incluir en nuestra dieta una mayor ingesta de leche, sardinas, almendras, garbanzos o salmón, entre muchos otros.
Igualmente, si sufrimos osteoporosis, debemos controlar esta enfermedad para evitar que la descalcificación de los huesos vaya cada vez a más.
Como se ha podido observar a lo largo de este artículo sobre los cuidados de la columna vertebral en personas mayores, es importante mantener un estilo de vida saludable y prestar una mayor atención a las actividades que realizamos diariamente y que puedan afectar a nuestra espalda. Así, podremos conseguir una buena calidad de vida hasta la vejez.
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¡Yo sí cuido tu columna!
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