Existen patologías que afectan a la columna vertebral y que pueden provocar dolores intensos, deteriorando nuestra salud y afectando a nuestra calidad de vida. Por esta razón, es necesario conocer qué es la espondilosis cervical, como podemos prevenirla y cuál es su tratamiento.

¿Te gustaría descubrir las causas y los síntomas de la espondilosis cervical? Quédate a leer este post, te mostramos todo lo que debes saber a continuación.

¿Qué es la espondilosis cervical?

La espondilosis cervical hace referencia al desgaste natural que se produce en los discos intervertebrales del cuello a raíz del envejecimiento. Como consecuencia, estos discos intervertebrales se deshidratan y pierden altura y densidad, pudiendo ejercer presión sobre la médula espinal en la zona del cuello y dar lugar a protuberancias óseas en las vértebras.

Cabe resaltar que la espondilosis cervical es un padecimiento muy frecuente entre las personas mayores, ya que un alto porcentaje de la población experimenta los signos de esta patología a partir de los 60 años.

Para diagnosticar si un individuo tiene espondilosis cervical, el médico especialista realizará un examen físico al paciente analizando sus reflejos, la amplitud de movimiento del cuello y la forma de caminar. Además, se pueden llevar a cabo estudios de diagnóstico como la radiografía, la resonancia magnética y la mielografía.

Síntomas de la espondilosis cervical

Parar poder detectar rápidamente la existencia de espondilosis cervical, se vuelve necesario conocer cuáles son sus síntomas e identificativos.

En este sentido, podemos comenzar notando molestias, entumecimiento y rigidez en el cuello, además de aparecer dolores de cabeza, debilidad u hormigueo en los brazos, espasmos musculares en la zona de los hombros y dificultad para caminar.

Otro de los rasgos característicos de la espondilosis cervical consiste en escuchar determinados sonidos internos como si nos crujiera el cuello.

Causas de esta patología

La espondilosis cervical aparece como consecuencia del desgaste que se produce en la columna vertebral a medida que van pasando los años. Además, aquellas personas que cuentan con trabajos que requieren de un gran esfuerzo físico, que realizan movimientos repetitivos o que cargan pesos, son más propensas a padecerlo.

Por otro lado, existen factores que pueden incrementar las probabilidades de sufrir esta enfermedad. Entre ellos, podemos resaltar el sobrepeso, el sedentarismo, el consumo de tabaco, determinadas condiciones genéticas y lesiones previas en el cuello.

Esto pone de manifiesto la importancia de llevar un estilo de vida saludable donde mantengamos una buena alimentación, practiquemos deporte, no hagamos uso de sustancias nocivas y cuidemos nuestra higiene postural.

Tratamiento de la espondilosis cervical

Finalmente, para obtener un conocimiento profundo sobre la espondilosis cervical, no podíamos olvidarnos de mencionar cuál es su tratamiento.

En un primer lugar, el paciente deberá hacer uso de una serie de medicamentos con la finalidad de minimizar el dolor que produce la patología, además de realizar ciertos ejercicios que le permitan fortalecer los músculos del cuello y los hombros.

Si la gravedad del padecimiento incrementa y el individuo no nota una mejoría, sería posible desarrollar una intervención quirúrgica, consiguiendo ampliar el espacio disponible para la médula y las raíces nerviosas, evitando así la compresión.

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Como se ha podido observar a lo largo de este artículo sobre las causas, los síntomas y el tratamiento de la espondilosis cervical, es imprescindible ponernos en manos de profesionales si creemos que padecemos esta patología, obteniendo una solución efectiva que nos permita recuperar nuestra vida y hacer desaparecer el malestar.

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